En lo que el último
episodio de la trilogía del Wolfpack. El director Todd Philips decide traernos
una conclusión que va ser muy decepcionante para muchas personas.
La historia nos
trae al Wolfpack de regreso todos ellos ya superando los hechos que ocurrieron
en Bangkok. Alan (Zach Galifianakis) no ha tomado por varios meses sus pastillas lo que ha provocado que
su comportamiento se haya convertido un peso en muchas personas, lo que lleva
la muerte de su padre. Stu (Ed Helms),
Phil (Bradley Cooper) y Doug (Justin Bartha) deciden llevar a Doug a Arizona
para puedan tratar con él. Pero estos fueron secuestrados por el mafioso
Marshall (John Goodman) quien tiene una disputa con Leslie Chow (Ken Jong) ya
que este le robo parte de un cargamento que él había robado. El Wolfpack tiene 3 días para recuperar el
cargamento y salvar a Doug.
Uno de los
problemas que tiene este filme es la sobresaturación de Alan y Chow. Estos dos
personajes funcionaban por que los utilizaban en porciones más pequeñas dándole
así más protagonismo a cuando vaya hacer algo cómico. Esto afectando realmente
la dinámica del grupo ya que todo gira a este personaje y no a la dinámica del
grupo.
Los únicos personajes
que son realmente cuerdos son Marshall y Jade (Heather Graham) ya que la mayoría
de los personajes parecen caricaturas de lo que estos fueron. Y estoy
excluyendo a las esposas de los personajes y a Doug porque su participación es
bien mínima. Stu lo único que hace en este filme es gritar mientras que Phil
trataba de mantener el grupo junto diciéndole si a todo lo que Alan decía. Este
filme se convirtió en el punto en donde ya no me agrada Melissa McCarthy debido
a que los personajes más recientes actúan iguales. Y esto es decepcionante ya
que ella realmente es graciosa pero ya me cansa ver el mismo personaje en
diferente ropa.
El filme hizo
bien al tomarse algo ya que la segunda siguió el mismo patrón de la primera película.
Pero se apartaron de la comedia pero no lograron tener ese mismo sentimiento
que tuvieron las anteriores. Aun así la película nos da ese hangover pero ya es al final con algo
que paso más ridículos que la confesión en el stripclub en Bangkok.
Como el último
episodio de esta triología es realmente decepcionante como la misma fue. A pesar de ser tener el titulo de Hangover
esta no se sintió como una más. A pesar de tener un humor más negro esta no es
tan graciosa como las anteriores. Ni ver a Chow desnudo y el cameo de un
personaje no me provoco risa ya que esto era lo que tenían que hacer al
principio de este filme. Por lo menos nos dieron una conclusión más o menos
satisfactoria para no volver a esta serie de películas que no necesitaban
secuela.
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